Os propongo un ejercicio sencillo. Se trata de usar el mismo lenguaje que se utiliza en hipnosis de manera fácil y con nosotros mismos. No es auto-hipnosis, ojo, eso es otra cosa. Se trata de hablar solos. Ya pensarán que estamos mal de la cabeza, pero da igual, se trata de cambiarnos a nosotros mismos mientras damos un paseo.
Cuando se hace hipnosis se utilizan una serie de patrones de lenguaje muy específicos, sobre todo los referidos a las sensaciones. Pero hay una serie de palabras que se llaman enlazadores, que sirven para hacer las transiciones. Esas son las que vamos a usar en este ejercicio. Mientras que… pasa esto, cuanto más…más pasa, o deja de pasar, que también puede ser el caso…
Buscar un sitio lo mas tranquilo posible(al principio, al menos), después de haber escrito en una hojita lo que queremos potenciar o eliminar, y teniendo claro ese y solo ese objetivo, cerramos los ojos, tomamos una respiración profunda y los abrimos lentamente. Leemos nuestro proposito, cerramos de nuevo los ojos y lo interiorizamos. Y ahora viene el paseo. Tomamos otra respiración profunda y elegimos uno de los caminos que expongo a continuación.
Si deseamos eliminar algo desagradable. Ponemos carita de disgustaditos, no de cabreo ni de asco ni de muy disgustados, de disgustaditos. Y nos centramos en caminar, en como los pies van tocando el suelo, el movimiento. Mientras, nos vamos diciendo algo así: «a medida que voy poniendo los pies en el suelo, mi disgusto con <lo que sea que hayas decidido>, se va diluyendo más y más», «mientras camino, mi respiración se hace más agaradable y <lo que sea> desaparece de mi entorno», etc., etc…. Y a medida que sentís que va desapareciendo, más o menos al 30% del paseo, cambiáis la carita por una cara más neutra y después del 50% una franca sonrisa y cambiais el dialogo:»<lo que sea> ha desaparecido de mi vida definitivamente», «cuanto más pienso en <>, más risa me da», todo por este estilo. Cuando lleguéis al final del paseo, eso que no os gustaba se habrá ido diluyendo. Es posible que necesitéis más de un paseo, pero da igual. Probad, experimentad, pero hacedlo, hacedlo ya…
Si lo que queréis es potenciar algo, el dialogo es similar, pero hay una diferencia, el dialogo de buen rollo empieza desde un principio y además se añade «y ya lo tengo» o «y ya está en mí». En cuanto al gesto inicial es directamente una sonrisa, pasando a carcajada de alegría al final del paseo.
En fin, espero que disfrutéis del este ejercicio y que me contéis como os ha ido…